Se trata de un sistema mecánico elaborado, de utilización sencilla. Cuando existen requisitos muy exigentes en cuanto a la firmeza de una rosca, los casquillos roscados KOBSERT® garantizan la fijación necesaria. Precisamente metales con una resistencia reducida al cizallamiento, como el aluminio o las aleaciones de aluminio o magnesio, se ven favorecidos por el refuerzo de la rosca.